Uno de los productos más fáciles y útiles de elaborar en casa es el desodorante. Con ingredientes simples como bicarbonato, aceites vegetales y aceites esenciales, puedes preparar una fórmula natural, eficaz y libre de químicos dañinos como el aluminio o los parabenos.
Los desodorantes comerciales suelen bloquear la transpiración de forma antinatural, lo cual puede interferir con la eliminación natural de toxinas. En cambio, un desodorante natural permite que el cuerpo respire, neutraliza el mal olor y respeta el equilibrio de la piel.
En nuestros talleres de cosmética natural, este es uno de los productos estrella. Cada persona puede ajustar la fórmula según su tipo de piel y aroma favorito. Y al elaborarlo tú misma, evitas envases innecesarios y conectas con un consumo más responsable.
Te animo a probarlo: es una pequeña acción con gran impacto. Tu cuerpo lo agradecerá y el planeta también. Pronto compartiré una receta paso a paso en el blog para que puedas hacerlo desde casa.